¿Quién fundó los Juegos Olímpicos Modernos?

Los Juegos modernos fueron creados por el barón francés Pierre de Coubertin. Para entender este fenómeno, debemos comprender la época en la que vivió. 

El siglo XVIII vio el descubrimiento de Olimpia, y el inicio de las excavaciones en el siglo XIX suscitaron un enorme interés por los Juegos Olímpicos de la antigüedad. Durante el siglo XIX hubo varios intentos de recuperar los Juegos: en Grenoble (Francia), Much Wenlock (Gran Bretaña) y Atenas (Grecia), por ejemplo. Sin embargo, quedaron como eventos locales sin mayor consecuencia en el ámbito mundial.

Pierre de Coubertin, nacido en 1863, se interesó mucho por estos Juegos de la antigüedad. También le llamó la atención el sistema educativo inglés, en el que se incluía el deporte en el currículum escolar, algo inaudito en Francia en aquel entonces. Pierre de Coubertin, inspirado por su investigación de primera mano en las escuelas inglesas y americanas, quiso hacer entender a sus contemporáneos los beneficios del deporte para la gente joven. No todo el mundo compartió su visión. 

El barón se dio cuenta de que necesitaba argumentos sólidos para cambiar la mentalidad de las personas a su alrededor. Después de esta visión, tuvo una idea extraordinaria: rescatar los Juegos Olímpicos. ¿Por qué Coubertin tuvo éxito donde otros fracasaron? Su genialidad fue darle inmediatamente a los Juegos una dimensión internacional y moderna, y verlos como parte de una amplia estrategia de educación a través del deporte. 

Pierre de Coubertin fue fiel a sus convicciones, tuvo fe en su visión y perseveró a pesar de varios contratiempos. Consiguió su objetivo con la creación de lo que se conoció como Comité Olímpico Internacional el 23 de junio de 1894 y con la celebración de los primeros Juegos Olímpicos de la modernidad en Atenas en 1896. 

Los intereses del barón no se limitaban al olimpismo. Pierre de Coubertin fue historiador, escritor y educador y le gustaba expresar sus puntos de vista en un amplio abanico de temas. Pierre de Coubertin murió en 1937. Su cuerpo fue enterrado en el cementerio de Bois-de-Vaux, en Lausana (Suiza), y su corazón reposa en una estela de mármol en Olimpia (Grecia). 

Como dato extra, Pierre de Coubertin fue el segundo presidente del COI, de 1986 a 1925.



Fuente:
Comité Olímpico Internacional, ¿Qué sabes de los Juegos Olímpicos?, p. 4 – 5.

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