Designado Gobernador de Coahuila por Madero.
Afiliado al maderismo, Carranza formó parte, como Secretario de Guerra y Marina, del gabinete provisional que formó Francisco I. Madero en Ciudad Juárez. Con el advenimiento de éste a la presidencia, en Julio de 1911, Carranza fue electo gobernador del estado de Coahuila e inició un período de gran actividad. Conservó el pie de guerra los cuerpos de tropas irregulares, trató de concentrar los contingentes de coahuilenses que habían quedado en otras partes del país e implanto la enseñanza militar obligatoria, pues Carranza preveía una traición del Ejército Federal y estaba preparándose para la lucha en caso de una revuelta militar. En efecto, el 18 de Febrero de 1913 recibió un telegrama del General Victoriano Huerta que decía: “Autorizado por el Senado, he asumido el Poder Ejecutivo, estando presos el presidente y su gabinete”.
Plan de Guadalupe.
El 26 de Marzo de 1913 en la Hacienda de Guadalupe, Carranza reunió a los hombres que lo habían seguido y sometió a su consideración un plan que éstos aprobaron con la sola adición de los considerandos. El Plan de Guadalupe desconocía a Huerta como presidente, a los poderes Legislativo y Judicial y a los gobiernos de los estados que 30 días después de esa fecha continuaran obedeciendo a la administración federal; creó el Ejército Constitucionalista y nombró primer jefe a Carranza, quien se encargaría interinamente de la Presidencia al ocupar la capital del país y convocaría a elecciones generales en cuanto se hubiera consolidado la paz. Además previno que los jefes militares revolucionarios de los estados asumirían el gobierno provisional de éstos al triunfo del movimiento.
Carranza y sus caudillos.
Carranza hizo contacto con numerosos caudillos a todo lo largo de la República. Álvaro Obregón, Benjamín Hill, Ramón F. Iturbe y Plutarco Elías Calles, entre otros, abrazaron inmediatamente la causa. Francisco Villa y José María Maytorena se lanzaron contra Huerta en forma independiente, aunque pronto se adhirieron al constitucionalismo. En el estado de Chihuahua accionaban otros revolucionarios como Manuel Chao, Maclovio Herrera, Rosalío Hernández, Orestes Pereyra y Tomás Urbina, Pablo González, Jesús Carranza, Francisco Murguía y Antonio Villareal accionaron en los estados de Nuevo León y Tamaulipas. También se encontraban entre sus principales caudillos Manuel M. Diegues, Francisco Coss, Lucio Blanco, Blas Corral y los hermanos Arrieta.
Carranza se levanta en armas.
El foco revolucionario cobró virulencia el mismo día en que Huerta dio a conocer telegráficamente su designación. Venustiano Carranza se rebeló por considerar que tal designación era anticonstitucional, e invitó a los demás gobernadores a secundar el movimiento que tomó el nombre de “constitucionalista” ya que lucharía por el respeto y observancia de la Constitución.
La lucha armada tuvo lugar desde el día 13 de Marzo de 1913, fecha en que Álvaro Obregón inició la campaña con el asalto a Nogales, hasta Julio de 1914, meses en que se combatió al huertismo, tenaz y valientemente, hasta expulsarlo del país. Aparecieron focos revolucionarios de frontera a frontera y de costa a costa.
Comisión de Constitución.
Carranza convocó un Congreso Constituyente para que por su conducto la nación entera expresara su voluntad y las reformas que se introdujeron no se atribuyeran a un interés particular. El Distrito Federal y cada Estado nombraría a un diputado y un suplente por cada sesenta mil habitantes, de acuerdo con las normas de la Constitución de 1857. Se manifestaba que los electos deberían presentarse en Querétaro, ciudad que Carranza había declarado por decreto capital de la República, el día 20 de Noviembre de 1916, para celebrar las primeras juntas, ya que oficialmente el Congreso Constituyente abriría sus sesiones el día primero de diciembre de ese mismo año. Su principal objetivo sería el de redactar la nueva Constitución.
Promulgación de la Constitución de 1917.
Constitución es la ley suprema de una sociedad jurídicamente organizada en un territorio determinado, la instituye el pueblo y corresponde al poder judicial velar por su cumplimiento.
La Constitución de 1917 fue firmada por el Congreso Constituyente (mismo que había sido convocado por Venustiano Carranza, después de someter a sus principales oponentes: Francisco Villa y Emiliano Zapata) el 5 de Febrero de 1917, para entrar en vigor el primero de mayo del mismo año. En un principio fue objeto de las más severas críticas por parte de algunos políticos exiliados, como Rodolfo Reyes y Jorge Vera Estañol, quienes le señalaron multitud de defectos de índole jurídica. En el terreno de las armas, los levantamientos promovidos por el brigadier Félix Díaz siempre tendieron a restaurar la Constitución de 1857. Durante el gobierno de Venustiano Carranza se expidieron muchas leyes reglamentarias, pero no todas. Por ejemplo, no se elaboró ni la ley agraria ni la ley del trabajo. Estas fueron obra de gobiernos posteriores. No obstante, se procedió primero tímidamente a efectuar actos derivados de la nueva ley fundamental.
En términos generales, la Constitución de 1917 es la expresión de los ideales de los grupos que participaron en la Revolución Armada, iniciada en 1910, pero sobre todo, del grupo constitucionalista en sus vertientes moderada y radical. Mientras que en algunos aspectos se advierte el predominio de los radicales, en otros privó lo señalado por el proyecto original del primer jefe. En lo sucesivo, a partir de 1921 se le han practicado múltiples reformas, obedientes a nuevas necesidades. La propia constitución deja abierta esta posibilidad, que los diferentes gobiernos han aprovechado.
Rumbo a Tlaxcalaltongo.
El último problema que Carranza tuvo que afrontar fue el de la sucesión presidencial. La agitación política a este respecto se hacía sentir desde principios de 1919 cuando el general Álvaro Obregón aceptó su candidatura a la presidencia. La lucha política se tornaba cada vez más complicada, se habían vuelto tirantes las relaciones entre el gobierno federal y las autoridades de Sonora. Los tres poderes de la entidad, luego de hacer una relación de los atropellos que habían sufrido por parte de Carranza, acordaron asumir otra vez su soberanía y los militares, con mando de tropas en el noreste se rebelaron también contra el régimen. Al fin se lanzó el Plan de Agua Prieta por medio del cual se desconocía a Carranza. El 7 de Mayo, a bordo de varios trenes, el presidente y su gobierno abandonaron la Ciudad de México.
Choza de Tlaxcalaltongo.
La columna de Carranza libró acciones y violentos combates contra sus atacantes en Apizaco, Rinconada y estación de Algibes. En este punto los aguaprietistas concentraron veinte mil hombres y levantaron la vía del ferrocarril. Para salvarse del peligro de sus atacantes, la comitiva presidencial abandonó el ferrocarril que los conducía, para proseguir a caballo, por la áspera serranía de Puebla. En un lugar de esta sierra, un militar revolucionario, que había fingido fidelidad a Carranza, el general Rodolfo Herrero, aconsejó pasar la noche en Tlaxcalaltongo, donde se tenía preparada una emboscada al todavía presidente legal de la Nación. La madrugada del día 21 de Mayo de 1920 la tropa que en apariencia custodiaba al presidente se lanzó disparando sobre el rincón de la choza donde dormía Carranza, a quien así dieron muerte.
Muerte de Carranza.
Venustiano Carranza murió el 21 de Mayo de 1920 en el pueblo de Tlaxcalaltongo, en el Estado de Puebla. Sus restos fueron trasladados a la Ciudad de México el 23 de Mayo, donde fueron recibidos por el honorable Cuerpo Diplomático. Al día siguiente fue sepultado en el Panteón Civil de Dolores, en presencia de una gran cantidad de personas de distintas clases sociales. El 5 de Febrero de 1942 sus restos fueron trasladados al Monumento a la Revolución, convertido por decreto en panteón de caudillos.
El 1° de Julio de 1920, por designación del Congreso, Adolfo de la Huerta, primera cabeza de la rebelión contra Carranza, se hizo cargo de la Presidencia de la República, debiendo minar el período constitucional de Carranza, convocar a elecciones y hacer entrega del poder el 30 de Noviembre de 1920 a Álvaro Obregón.
Comentarios
Publicar un comentario
Si deseas comentar dentro de la línea del respeto, eres bienvenido para expresarte