Luis preparaba su tarea.
Trajo la mesita y la silla.
Acomodó sus libros; se sentó.
Pero entonces oyó un crujido.
¡Zas! ¡La silla se había roto!
Todos corrieron a ver lo que pasaba.
- ¿Te lastimaste, Luis? – le preguntó su mamá.
- No – respondió él, levantándose.
- ¡Ja, ja, ja! – rieron sus hermanos.
De allí a poco llegó un carpintero.
Traía clavos, un formón, un martillo.
Revisó la silla; compuso la pata rota.
- Ya quedó sólida – dijo –. No volverá a romperse.
- ¡Gracias, señor carpintero! Ahora puedo seguir mi tarea.
Generación 1960. Mi libro de 1° año, Ed. Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuito, p. 144 – 145. App CONALITEG Digital. Generación 1960. Primer Grado. Mi libro de 1° año.
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